Superdepredadores

     Las truchas, en su episodio de migración buscando aguas someras y cristalinas, batallan decididamente contra corrientes y obstáculos, para llegar a los frezaderos preparadas para la puesta, fecundación y desarrollo de los embriones. Son momentos espectaculares, los machos, que son mayoría, luchan entre si por el dominio, el más fuerte será el macho dominante y se hace el amo del frezadero, pero no podrá bajar la guardia ni un instante. Las truchas prefieren frezaderos que estén cercanos a sus refugios, porque en estas circunstancias son victimas propicias para sus depredadores.

Un depredador, más negro que el carbón, se zambulle sigiloso y con su largo pico atrapa a una hembra que distraída en su quehacer acaba engullida. Nubes en el cielo y crepúsculos en el agua. La espantada extensiva siembre el caos por doquier, pero no es el final de la pesadilla, no, porque otra negra sombra apresa a un macho en su fuga hacia el refugio. Destruido el prodigio biológico, el terror conquista la zona y sus pobladores más distinguidos no saldrán de sus resguardos hasta que la oscuridad de la noche les preserve. Por esta vez se han salvado, aunque no saben cuándo será el siguiente ataque, ni su desenlace, pero lo que si saben es que tienen el compromiso de perpetuar la especie y a buen seguro que lo pretenderán, siempre lo intentarán.

 

El artificio en la mochila y el vaquero recubriendo las engomadas botas. Sedales durmientes, tridentes, tiraderas y luz artificial. La astucia del furtivo las sorprende procreando, una, dos, tres…cuantas más mejor. La noche es un momento propicio para el depredador más apocalíptico de los seres vivos, pero por el día también siembran la desolación. Arcones repletos, barrigas llenas. Dicen que son de allá, de lejos, pero de aquí y de cerca, también.

 

No hay nada peor que el depredador desconocido, no hay una reacción inmediata porque el instinto de supervivencia no reconoce el peligro de inmediato. Es por esto que los depredadores no naturales se convierten en superdepredadores, seres insaciables y muy eficaces en sus ataques.

Mañana será igual y así hasta abril. Cuantas bajas en la lista y cuantas más sin nacer.  Aguas revueltas, nidadas fallecidas…problemas sin resolver.